Aprobaron visas humanitarias de padres de Jefferson

Raleigh, N.C., 26 de julio de 2024- “Jefferson Fernández Pineda aparecerá” fue la afirmación que unió a familiares, amigos y líderes comunitarios y religiosos que acudieron a la vigilia organizada por Justicia y Esperanza, a nombre de este joven hondureño que se perdió entre las aguas de la playa de Pleasure Island el pasado 4 julio, y cuyo cuerpo no ha sido encontrado.

Sus familiares no pudieron celebrar el cumpleaños número 22, el pasado 20 de julio, debido a su lamentable desaparición.

Su esposa, Jenny Ramírez, de 23 años, pide que no se detenga la búsqueda y no pierde la esperanza de que se encuentre vivo y perdido. Está embarazada de 4 meses y todos los días ora para que ocurra un milagro que le permita criar a su hijo junto a su padre.

La fundadora de Justicia y Esperanza, Carmen Rodríguez, informó que después de tanto esfuerzo, finalmente la visa humanitaria solicitada para la desconsolada madre de Jefferson, Gisela Pineda, fue aprobada. 

El tío materno de Jefferson, Denis Chávez Pineda, quien lo vio crecer y siente por él un gran afecto de padre, aseguró que las autoridades de la Embajada de Estados Unidos en Honduras también aprobaron la visa humanitaria para su papá, Juan Carlos Fernández.

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Gisela y Juan estarán llegando a Carolina del Norte el próximo 6 de agosto y las autoridades estadounidenses les permitieron una estadía de una semana.

En medio del profundo dolor que embarga a esta familia, la noticia de la aprobación de ambas visas humanitarias se sintió como un alivio, como una nueva esperanza de reencuentro y abrazo necesario.

Denis Chávez precisó que está esperando la llegada de sus familiares para volver al lugar de Kure Beach, Pleasure Island, donde habían iniciado las labores de búsqueda y rescate el día 4 de julio.

“Iremos para que Gisela y Juan estén en el lugar buscando las respuestas que aún no nos han dado. Vamos a presionar a las autoridades para que nos digan más acerca de los procedimientos de búsqueda del cuerpo de mi sobrino”, indicó a La Conexión USA, durante la vigilia por Jefferson.

Siguiendo protocolos estatales, las autoridades de rescate detuvieron la búsqueda el 15 de julio, pero Denis y Jenny denuncian que desde un principio estas labores carecieron de seriedad, de constancia y diligencia.

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“Ellos han sido negligentes. Nos dijeron que estaban buscando el cuerpo cuando no lo estaban haciendo. Lo último que nos dijeron fue: ´Ya no vengan más. No hay nada más que buscar´, pero nosotros no hemos visto su cuerpo. Si hubiesen hecho su trabajo correctamente y sin descanso, tendríamos a mi sobrino vivo en casa o al menos su cuerpo”, dijo.

“Nos trataron como si este caso no fuese importante, solo porque somos hispanos”, agregó.

Con la fe intacta

La vigilia por Jefferson se realizó en La Grande Party Center, ubicado en el 2616 S. Saunders St. Raleigh, el pasado 26 de julio, a partir de las 7 p.m.

Denis Chávez Pineda era el único familiar del joven que estaba presente y, con los ojos enrojecidos por el llanto, confirmó su ferviente fe en que pronto volverá a abrazar a su sobrino y que todo esto no será más que una terrible pesadilla.

“Mientras no tengamos el cuerpo, me aferro a la esperanza de que mi querido sobrino está vivo y pronto aparecerá”, dijo con la voz entrecortada, cuando fue llamado por Nelson Rea para compartir su dolor y sensación de vacío con los presentes.

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Más de 50 personas acudieron a la vigilia de Jefferson Fernández, entre las cuales destacaron líderes de grupos comunitarios que se han solidarizado con esta familia y líderes religiosos.

La voz de Denis se escuchó fuerte y clara.

“Hago un llamado al gobernador Roy Cooper para que nos escuche. Él tiene el poder para ordenar que continúe la búsqueda de mi sobrino, que se movilicen botes y helicópteros. Los rescatistas hicieron mal las cosas. Actuaron con lentitud y sin la constancia que estos casos requieren. Ellos decían que seguían buscando cuando no era cierto. Él gobernador tiene que hacer algo porque este dolor es desesperante”, dijo.

Bajo la luz de oración 

Con luces en sus manos, los presentes se unieron a la oración elevada por los líderes religiosos invitados, la cual avivó la fe y la esperanza de esta familia en tan duro momento.

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Emitieron conmovedores discursos las siguientes personas de fe:

-Predicador Orlando Cerrato.

-Pastor Gaudencio Villasana y su esposa Conchita Villasana.

El líder comunitario Nelson Rea condujo la ceremonia de luz y tuvo emotivas intervenciones musicales, poniendo al servicio de la familia Fernández Pineda su don de canto, con la esperanza de consolar sus corazones.

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