La familia de exconcejal de Caracas detenido pide una fe de vida al desconocer su paradero

Caracas, 13 dic (EFE).- La familia del exconcejal de Caracas Jesús Armas, detenido el martes en la capital venezolana, exigió este viernes al Estado una fe de vida del también activista, tras casi 72 horas sin conocer su paradero ni las condiciones en las que se encuentra.

En las afueras del Palacio de Justicia de Caracas, la pareja del exconcejal, Sairam Rivas, indicó que a las 20:00 hora local (00:00 GMT) de este viernes se cumplen 72 horas de lo que considera una «desaparición», ya que, durante ese tiempo, no han sabido «nada» de la ubicación del exconcejal ni si ha recibido el tratamiento que necesita por ser asmático y sufrir «fuertes alergias».

«Tememos profundamente por la vida de Jesús. Exigimos una fe de vida porque no sabemos en qué condición está, cómo lo tienen ni qué le pueda estar pasando en este momento», expresó.

Asimismo, Rivas -acompañada de la madre del activista- aseguró que han ido a «diversos centros de reclusión de cuerpos de seguridad del Estado», y dijo que temen que haya sido presentado ante un tribunal de manera telemática sin permitir el acceso a los abogados de confianza.

«El Estado es responsable de lo que a él le pueda pasar y de los daños que le hagan a su integridad física», afirmó.

Por su parte, la madre del exconcejal, Amanda de Armas, expresó sentirse «muy preocupada» porque «ya es demasiado el tiempo» sin conocer dónde se encuentra su hijo, cuya libertad pide a las autoridades.

«Yo se lo suplico, con todo el corazón, que me regresen a mi hijo sano y salvo, o que me digan dónde está, por lo menos saber dónde está, dónde lo tienen detenido», dijo.

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La oposición mayoritaria, agrupada en la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), y varias organizaciones no gubernamentales han exigido información sobre el paradero del también presidente de la ONG Ciudadanía Sin Límites.

El miércoles, Rivas indicó que, según personas que presenciaron la detención, Armas fue «sacado de forma abrupta» de un café en una zona de Caracas e «ingresado por la fuerza en una camioneta».

Entonces, dijo que teme que su pareja sea vinculado con una «nueva trama del régimen» que -subrayó- «inventa supuestos atentados y supuestas conspiraciones» con el fin de «perseguir a los defensores de derechos humanos, a los luchadores sociales y a los activistas políticos».

Este viernes, el alto comisionado de la ONU para los DD.HH., Volker Türk, dijo sentirse preocupado debido a que «muchos de los detenidos» en el país «lo han sido de forma arbitraria, incluyendo adolescentes y jóvenes, miembros de la oposición, defensores de derechos humanos, periodistas, abogados» o personas que se encontraban en el mismo lugar donde hubo protestas poselectorales, declaraciones que rechazó el Gobierno.

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