2-5. El Barcelona arrolla al Real Madrid para coronarse ‘supercampeón’

Yeda (Arabia Saudí), 12 ene (EFE).- Thibaut Courtois, con sus paradas en el arranque de la final de la Supercopa de España, antes de recibir cinco goles del Barcelona, y el peligro que generó Kylian Mbappé, que ha marcado en las tres finales disputadas con el Real Madrid, fueron los únicos jugadores de Carlo Ancelotti que estuvieron a su nivel en la goleada recibida (2-5).

– Thibaut Courtois (6): Sostuvo a su equipo en el arranque de partido con dos grandes paradas a Lamine Yamal, en un disparo desviado por Mendy, y a un testarazo a placer de Raphinha. Nada pudo hacer en los goles que fue recibiendo y que fueron aumentando su impotencia ante la fragilidad defensiva de sus compañeros. Con el quinto ya dejó de ser exigido tras quedarse el Barcelona con un jugador menos.

– Lucas Vázquez (2): Vivió una pesadilla en su duelo con Raphinha. También superado, sin ayudas, en las subidas de Balde. Sufrió a sus espaldas y le costó llegar en acciones donde el Barcelona generó siempre peligro en el espacio entre el gallego y Tchouaméni. Provocó que saliese en la foto de varios goles, llegando tarde y viendo el remate de gol. Superado siempre por Raphinha y rebajando su habitual influencia ofensiva, fue sustituido por Ancelotti a los 52 minutos en un partido que demuestra que el Real Madrid tiene un problema sin Dani Carvajal en días grandes.

– Aurélien Tchouaméni (1): Demostró ante la exigencia que no es central. Superado todo el partido en labores defensivas hasta que Ancelotti lo sacó del centro de la zaga para devolverlo a su posición natural, el mediocentro, antes de sustituirlo por recibir tarjeta amarilla en una durísima entrada a Dani Olmo. Sufrió en el marcaje a Lewandowski, mal posicionado nunca encontró su sitio, se comió el amago de Yamal en el tanto del empate y hasta mostró dudas con balón en el inicio de jugada. En ataque, un testarazo suyo, estuvo cerca de ser el segundo tanto madridista.

– Antonio Rüdiger (4): El defensa que habitualmente lleva la voz de mando, rebajó sus prestaciones, superado como el resto de zagueros ante la velocidad ofensiva del Barcelona. Taponó como pudo varios disparos, fue al choque para intentar frenar cuando pudo a Lewandowski, pero no ofreció seguridad defensiva.

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– Ferland Mendy (2): No está siendo la temporada del lateral francés que perdió su fortaleza defensiva cediendo en el duelo que protagonizó con Lamine Yamal. Llegó tarde a la carrera del joven barcelonista en el gol del empate y quedó ya marcado en un pulso del que salió perdedor.

– Fede Valverde (5): Se desgastó en coberturas y largos recorridos para tapar las carencias tácticas de un Real Madrid superado. Provocó que pese a ser protagonista en varias acciones de peligro del rival que cortó lanzándose al césped, perdiese su aportación ofensiva tan importante para Ancelotti. No se descolgó en ataque ni chutó y terminó cubriendo el agujero en el lateral derecho como solución de urgencia.

– Eduardo Camavinga (2): Elegido por Ancelotti para llevar el mando del juego protagonizó un partido para el olvido. Fue sustituido al descanso tras haber corrido el riesgo de ser expulsado por un agarrón a Lamine. Amonestado antes por cometer un penalti inocente, sobre Gavi, que provocó la remontada del Barcelona. Estuvo impreciso, lejos de su nivel.

– Jude Bellingham (4): Acusó el desgaste físico y llegar a la final tras sufrir una sobrecarga muscular. Perdió la chispa que tenía en su racha goleadora sin poder aportar remate, desgastándose en labores defensivas con muchos metros recorridos y poco protagonismo. Apareció para filtrar el pase al espacio a Mbappé que provocó la expulsión de Szczesny pero el Real Madrid añoró al futbolista que había asumido el liderazgo.

– Rodrygo (5): Despertó en la segunda parte tras estar totalmente desaparecido en la primera, en la que cometió un error en una pérdida que costó un gol en la transición. Estrelló una volea en el palo y puso en la escuadra el lanzamiento de una falta en su octavo tanto del curso. Mostró orgullo cuando vinieron mal dadas y lo intentó siempre.

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– Vinícius (4): Enterrados los duelos ante Araujo que tanto dieron que hablar en otros clásicos, perdió la batalla ante Koundé. Apenas lo encaró y solamente lo superó en una ocasión que acabó con el disparo de Rodrygo al poste en el arranque del segundo tiempo. Había aparecido en el robo de la acción del primer gol del partido, el tanto de Mbappé pero no fue el futbolista persistente que siempre la pide y lo intenta. De nuevo recibió una tarjeta amarilla por protestar y fue sustituido por Ancelotti a los 76 minutos.

– Kylian Mbappé (6): firmaba una gran final hasta que recibió un pisotón en el tobillo izquierdo de Koundé que le hizo jugar tocado el resto de la final. Decidió con calidad en el primer gol, en contragolpe exhibiendo virtudes con una bicicleta a Balde y buena definición. Fue siempre el que más peligro generó del ataque madridista, provocando la expulsión de Szczesny con su velocidad. Va a más pese al mal partido de su equipo.

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– Dani Ceballos (4): Jugó toda la segunda parte al entrar por Camavinga y pese a su voluntad de aumentar el criterio del Real Madrid con balón, no tuvo incidencia en el partido ni cuando su rival se quedó en inferioridad.

– Raúl Asencio (5): Entró con el partido decidido a los 52 minutos y no fue exigido tras quedar con diez jugadores el Barcelona. Cumplió en las acciones que tuvo que aparecer con su carácter habitual.

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– Luka Modric (4): Recurrió Ancelotti a su visión de juego en el minuto 64 pero no estuvo acertado con balón, sin su precisión habitual, y acabó contagiado de la falta de ritmo en la parte final del partido.

– Fran García (sc): Disputó los quince minutos finales al entrar por Mendy y apenas apareció en el partido sin aportar el peligro que necesitaba su equipo por banda izquierda.

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