Los mejores destinos para comer al aire libre

Raleigh, N.C., 27 de agosto de 2025- Comer bajo el sol o la brisa fresca ya no es solo una opción, sino una experiencia cultural que define la manera en que los estadounidenses disfrutan la gastronomía local. 

Una nueva encuesta realizada por Advance Funds Network a más de 3,000 “foodies” de todo el país, reveló los 150 vecindarios más atractivos para comer al aire libre. 

Entre ellos, tres comunidades de Carolina del Norte destacaron por su autenticidad y ambiente vibrante: Downtown Asheville, Historic Downtown Wilmington y NoDa en Charlotte.

Asheville: el corazón creativo de las montañas

El centro de Asheville, ubicado en el corazón de las Blue Ridge Mountains, se posicionó en el puesto #26 del ranking nacional. Con su aire bohemio, músicos callejeros, cervecerías artesanales y restaurantes independientes, la ciudad ha convertido sus calles en un escenario ideal para disfrutar de una cena al aire libre.

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Un ejemplo es Pillar Rooftop Bar & Kitchen, donde el público puede deleitarse con cocteles artesanales, pequeños platillos y una vista panorámica de la ciudad y las montañas, todo acompañado del resplandor del atardecer.

Wilmington: sabor frente al río Cape Fear

En el puesto #33, el centro histórico de Wilmington combina su encanto sureño —calles de ladrillo y balcones de hierro forjado— con una variada oferta de patios y terrazas para cenar.

El Front Street Brewery es uno de los favoritos de locales y visitantes: ofrece cerveza artesanal de la casa y platos tradicionales como camarones con sémola y sándwiches de cerdo desmenuzado, todo con mesas al aire libre que permiten disfrutar de la brisa que viene del río Cape Fear.

NoDa: el distrito artístico de Charlotte

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El vecindario NoDa (North Davidson Arts District), reconocido como el epicentro cultural y artístico de Charlotte, alcanzó el puesto #76 en la lista. Sus calles llenas de murales, música en vivo y microcervecerías crean un ambiente perfecto para compartir entre amigos en terrazas iluminadas con luces colgantes.

Uno de los lugares más icónicos es Haberdish, un restaurante de cocina sureña moderna que sirve pollo frito, pan de maíz en sartén y cocteles creativos en un patio acogedor que respira arte y comunidad.

Al aire libre

Según Advance Funds Network, las comunidades que lideran este tipo de listas no destacan únicamente por la calidad de la comida, sino porque sus negocios locales han invertido en crear ambientes que invitan a quedarse más tiempo y a regresar. “Cuando restaurantes, cafés y bares ofrecen algo más que un plato, lo que construyen es una comunidad”, afirmó Irving Betesh, director de la compañía.

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En la mesa nacional

El reconocimiento de Asheville, Wilmington y Charlotte como destinos de referencia para el “outdoor dining” pone de relieve el papel de la gastronomía local en el turismo y la economía del estado. Cada vecindario ofrece no solo un menú, sino una experiencia que combina historia, cultura y sabor.

Así, Carolina del Norte reafirma que comer al aire libre es más que una tendencia: es parte de su identidad comunitaria y un atractivo que sigue conquistando paladares de todo el país.

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