Tebogo y Nadeem saltan la banca, McLaughlin-Levrone vuela

París, 8 ago (EFE).- El botsuano Letsile Tebogo y el pakistaní Arshad Nadeem saltaron la banca de los 200 metros y el lanzamiento de jabalina, respectivamente, en una jornada que iluminó el récord mundial de la imparable estadounidense Sydney McLughlin-Levrone en los 400 vallas.

Todo el mundo esperaba el segundo oro del velocista norteamericano Noah Lyles tras ganar en el hectómetro. En cambio, como luego anunció la federación de su país (USATF), compitió después de haber dado positivo por covid-19.

«Podemos confirmar que Noah Lyles dio positivo por COVID-19 el martes 6 de agosto. En respuesta, el Comité Olímpico y Paralímpico Estadounidense (USOPC) y la USATF rápidamente pusieron en marcha todos los protocolos necesarios para dar prioridad a su salud, el bienestar de nuestro equipo y la seguridad de los demás competidores», informó el comunicado.

«Nuestro principal compromiso es garantizar la seguridad de los atletas del equipo de Estados Unidos manteniendo su derecho a competir. Tras una exhaustiva evaluación médica, Noah decidió competir esta noche. Respetamos su decisión y seguiremos vigilando de cerca su estado», expuso la USAFT minutos después de la final, en la que Lyles terminó tercero y tuvo incluso que ser retirado de la pista en una silla de ruedas.

Aprovechó dicha circunstancia Letsile Tebogo, doble medallista en la velocidad de Budapest 2023, donde dominó por completo Lyles, para convertirse en el primer campeón olímpico de su país con récord continental incluido (19.46) y el primer ganador africano en esta prueba. La plata fue para el estadounidense Kenneth Bednarek (19.62), que superó a su compatriota por ocho centésimas (19.70).

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Abanderado en la Ceremonia de Inauguración de su país, como Tebogo, el pakistaní Arshad Nadeem añadió otra sorpresa en la tarde-noche de Saint Denis al imponerse en la final de lanzamiento de jabalina por delante del gran favorito, el indio Neeraj Chopra, con récord olímpico incluido.

Plata en los pasados Mundiales de Budapest 2023, el lanzador pakistaní se encaramó a lo más alto de la clasificación en su segundo intento con 92,97 metros, con lo que superó el tope olímpico que tenía, con 90,57, el noruego Andreas Thorkildsen desde Pekín 2008.

Chopra, defensor del título y campeón universal, en su único tiro válido hizo 89,95. Le permitió ocupar el segundo lugar del podio, pero no pudo con Nadeem, que a sus 27 años se convierte en el primer campeón de su país en la historia del atletismo olímpico.

Había sido quinto en Tokio y esta temporada figuraba en la sexta posición del ránking mundial. Su mejor registro era de 90,18 metros. En París rompió todos los moldes y se incrustó en el Olimpo en el que está incluida con letras de oro la estadounidense Sydney McLaughlin-Levrone después de deslumbrar en la final de 400 vallas con récord mundial incluido (50.37).

La estadounidense, que defendía el título olímpico obtenido en Tokio 2020, mejoró la marca de 50.65 que ella misma había establecido el pasado 30 de junio en Eugene (Oregón). Se mostró pletórica en la pista morada del estadio de Saint Denis en una carrera equilibrada con la otra gran favorita, Femke Bol, hasta el último hectómetro, cuando la neerlandesa se hundió.

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Nunca ha perdido McLaughlin-Levrone ante Bol, que deberá esperar para coronarse en unos Juegos. La norteamericana, que el miércoles cumplió 25 años, no aflojó un ápice en los últimos metros y no solo se coronó como bicampeona olímpica, sino que lo hizo en plan estelar, con nueva plusmarca.

De nuevo Bol no pudo resistir el tren de su gran rival. Se atascó justo antes de entrar en la recta e incluso perdió el segundo puesto ante otra estadounidense, Anna Cockrell, que se hizo con la plata con mejor marca personal (51.37). La neerlandesa repitió el bronce de Tokio con 52.15.

El también estadounidense Grant Holloway, triple campeón mundial, puso el broche a la sesión al imponerse en la final de los 110 vallas de forma incontestable con 12.99. Dejó la plata a su compatriota Daniel Roberts (13.09) y el jamaicano Rasheed Broadbell (13.09) apartó del sueño al español Quique Llopis (13.20).

Poco antes otra estadounidense, Tara Davis-Woodhall, subampeona mundial, había destronado a la alemana Malaika Mihambo en el salto de longitud con una magnífica marca de 7,10 por los 6,98 de la germana.

José Antonio Pascual

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