El primer ministro japonés aboga por una «gran coalición» con la oposición

Tokio, 2 ene (EFE).- El primer ministro japonés, Shigeru Ishiba, abogó este miércoles por la creación de una gran coalición con partidos de la oposición como «una opción viable», y después de que su formación quedara muy debilitada en las últimas elecciones del pasado octubre.

Ishiba, líder del gobernante Partido Liberal Democrático (PLD), hizo estas declaraciones durante un programa de radio, donde señaló que «sería una opción» y que así lo contempla también su socio en coalición, el budista Komeito.

«Debemos tener cuidado de que si no tenemos un propósito, un solo paso en falso podría resultar en la creación de algo como la Asociación de Asistencia al Gobierno Imperial», refiriéndose a una organización que tenía como objetivo eliminar el seccionalismo y el faccionalismo de la política durante la Segunda Guerra Mundial.

En relación a los principales partidos de la oposición, el mandatario señaló que el objetivo es «una política centrista» y que existe algo en común con estas formaciones además de una amistad de años con sus líderes.

«Me gustaría desempeñar un papel central en la creación de consenso dentro de la coalición gobernante, y espero que finalmente conduzca a una gran coalición», dijo Tetsuo Saito, quien lidera el partido Komeito, en otro programa de radio emitido el miércoles.

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El primer ministro japonés afronta el actual mandato de forma incierta tras ser reelegido para el cargo en la Dieta (Parlamento nipón), donde se impuso con una mayoría simple, lo que le deja en la posición más débil que ha tenido un líder nipón de las últimas tres décadas.

Ishiba asumió el cargo de primer ministro de Japón el pasado 1 de octubre tras ganar las primarias del Partido Liberal Democrático (PLD) y convocó elecciones anticipadas el 27 de octubre, una decisión con la que esperaba asegurar de nuevo el dominio de la formación que desde 1955 ha gobernado casi de manera ininterrumpida.

Sin embargo, el descontento de la población por la inflación y el estancamiento económico y los escándalos de fondos ilícitos derivaron en una significativa caída electoral al no lograr el PLD y su socio, el budista Komeito, mantener la mayoría absoluta parlamentaria.

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