Economía
Von der Leyen arrancará la legislatura con una estrategia basada en el informe Draghi
Estrasburgo (Francia), 27 nov (EFE).- Los grupos políticos del Parlamento Europeo reflejaron este miércoles la división en el hemiciclo de cara a la aprobación de la Comisión Europea (CE) que presidirá de nuevo la alemana Ursula von der Leyen, con importantes deserciones previstas en el voto de los principales grupos proeuropeos.
Desde el Partido Popular Europeo (PPE) -que votará mayoritariamente en favor de la nueva CE a excepción del PP español y otras delegaciones menores-, su líder Manfred Weber insistió en su idea de que la coalición de partidos que saque adelante legislación en los próximos años se extienda desde los Verdes hasta los Conservadores y Reformistas Europeos, el de la italiana Giorgia Meloni.
Además, advirtió de que para él la extrema derecha, que personificó en el húngaro Viktor Orban o la francesa Marine le Pen, «no son competidores democráticos sino enemigos políticos».
La líder del grupo socialdemócrata, Iratxe García, se dirigió directamente a Weber y a la propia Von der Leyen para pedirles que el PPE renuncie a pactar con su mayoría alternativa con la extrema derecha, «sean fieles a su tradición europeísta y reafirmen su compromiso con la mayoría proeuropea». «Nuestro apoyo no es un cheque en blanco. No aceptaremos un doble juego», advirtió.
En un dardo al PP español, García criticó a los partidos «que irresponsablemente han intentado debilitar a la nueva Comisión, han socavado el prestigio de la institución y han expuesto a la Unión a una crisis de gobernabilidad», al tiempo que subrayó que el sí socialdemócrata «es un sí por la estabilidad de la Unión Europea (UE)».
Sus diputados, sin embargo, no votarán unidos: se abstendrán o votarán en contra los alemanes del SPD, los franceses y parte de los belgas.
El grupo más numeroso que votará unido en contra de la nueva Comisión Europea será la ultraderecha de los Patriotas por Europa, cuyo líder, el francés Jordan Bardella, tildó a los nuevos comisarios de «anónimos» que deciden «desde los pasillos de Bruselas» sobre la vida de los europeos
«Seguiremos en la misma inacción ante la competencia desleal, las mismas reglas en los mercados de la electricidad, la misma ecología punitiva, la misma oleada migratoria que cambia la identidad de nuestro continente, la misma debilidad frente al islamismo», dijo Bardella.
Desde el grupo de los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), Nicola Procaccini dijo que darán libertad de voto a sus eurodiputados «porque cada una de nuestras delegaciones tiene derecho de decidir en función de sus propios intereses nacionales».
«No significa que seamos euroescépticos o antieuropeos, sino que apreciamos la idea maravillosa de la Europa de los pueblos, unida en la diversidad», argumento.
En ECR votarán a favor los italianos de Fratelli y los belgas de la soberanista flamenca NVA y, en contra, los polacos del PiS, franceses, rumanos, luxemburgueses y suecos.
Valérie Hayer, de los liberales de Renovar Europa, criticó fuertemente los procedimientos de las audiencias en la Eurocámara de los candidatos designados, «vampirizado» por los debates nacionales y los intereses de los grupos, y pidió al PPE y a los socialistas elegir la única mayoría posible capaz de sacar adelante iniciativas como el fondo de recuperación o el Pacto Verde, la «de centro».
Se espera que los liberales voten mayoritariamente a favor de la nueva Comisión, a excepción de los belgas francofonos del Movimiento Reformador.
La portavoz de los Verdes/Alianza Libre Europea, Terry Reintke, afirmo que el Parlamento entró en un «juego indigno» con las audiencias de los comisarios designados y considero que «solo una mayoría europeísta va a permitir que la UE funcione».
«Que el PPE esté dispuesto a pactar con la extrema derecha es un peligro», asevero.
En los Verdes votarán a favor mayoritariamente alemanes y neerlandeses y, en contra, italianos, españoles, franceses o belgas.
Por su parte, Manon Aubry, de la Izquierda, dijo a Von der Leyen que su nuevo Colegio de comisarios será «el primer gobierno de la derecha y la extrema derecha de la Unión Europea»
«Es, en realidad, la Comisión del fin del cordón sanitario, de la vergüenza, que extiende la alfombra roja a la extrema derecha», comentó, y agrego que «el proceso de nombramiento de esta Comisión ha sido un escándalo».
Mientras, Sarah Knafo, del grupo de la Europa de las Naciones Soberanas, lamentó que los ciudadanos hayan perdido el interés por saber «quién es nombrado comisario», y avanzó que su grupo «no va a dar respiro» a la nueva Comisión en los próximos cinco años.
La previsión es que todos los diputados de estos dos últimos grupos votarán en contra.
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