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EDITORIAL

Resilencia y esperanza

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Resilencia y esperanza

Por Coreen Villalobos Mundo

¡Somos 1,122,224 latinos!

Representamos el 10.7% del total de la población de Carolina del Norte, que ahora es de 10,439,388.

Año tras año el número de inmigrantes hispanos se ha incrementado notablemente en los estados de Carolina del Norte.

Seguimos creciendo en número y ya no somos tan invisibles como antes.

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Sin embargo, en vista de que las instituciones del estado no pueden ignorar nuestra vibrante presencia, y a pesar de ciertos esfuerzos realizados por valorar nuestra diversidad, propiciar la equidad y hacernos sentir incluidos en el sistema, nuestra población sigue enfrentando muchos desafíos.

La barrera del lenguaje, el acceso al sistema de salud y el acceso a opciones de trabajo dignas y estables continúan quitándonos el sueño y ralentizando nuestra incorporación productiva a un sistema que pide a gritos nuestro aporte… porque lo necesita, porque somos trabajadores creativos e ingeniosos.

Pero sobre todo… somos resilientes.

Se dice que la Navidad es una fecha para olvidar lo malo y recordar lo bueno.

Cada vez que nos preparamos para colocar a Niño Dios sobre su cama de paja en el pesebre, pareciera que algo mágico reseteara nuestro cerebro para recodificar la realidad y nos preparara para volver a empezar, perdonando las injusticias y desigualdades.

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“ESPERANZA”… a este sentimiento nos aferramos para comenzar el Año Nuevo con más ánimos.

“ALEGRÍA”… a esa emoción nos aferramos para sobreponernos el profundo dolor de la lejanía y del destierro.

“TRADICIÓN”… es la que defendemos para sentirnos que, a pesar de ser inmigrantes, pertenecemos a un hermoso y rico sistema de creencias, determinado por la esencia y el origen.

La Navidad y las fiestas familiares en torno a la llegada del Año Nuevo son un colorido y musical receso.

Pero la verdad es que la comunidad latina, durante este receso, está recargándose para vaciar su energía en sus luchas cotidianas.

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Todo parece indicar que, en el 2024, año electoral, los latinos seguirán abriendo zanjas para hacer tambalear las bases de algunos cimientos políticos.

Muchos más hispanos que antes están listos para exigirle a representantes y demás autoridades gubernamentales el cumplimiento de promesas electorales y la ejecución de políticas de equidad e inclusión.

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